CAMPAÑA INTERNACIONAL BEAT THE MICROBEAD
SÉ PARTE DEL CAMBIO
Pequeñas partículas de plástico son usadas a menudo en cosméticos, productos de belleza y cuidado personal como agentes de limpieza, agentes emulsionantes (que sirven para estabilizar el producto) o simplemente como rellenos para abaratar costes. Lavarse la cara o los dientes o usar cosméticos con productos que contienen microplásticos tiene un impacto los ecosistemas marinos y por lo tanto en nuestra calidad de vida y salud.↗ Estos microespecíficos, apenas visibles a simple vista, fluyen directamente del desagüe del baño al sistema de alcantarillado. Las plantas de tratamiento de aguas residuales no están diseñadas para filtrar estas microperlas y esa es la razón principal por la que contribuyen a la sopa de plásticos que gira alrededor de los océanos de nuestro planeta. Los animales marinos absorben o ingieren microplásticos. La toxicidad que estos producen en la fauna marina se transmite a lo largo de la cadena alimenticia en la que los seres humanos desempeñan la función de consumidores finales. Las microesferas de plástico no son biodegradables y una vez que ingresan al medio marino son imposibles de eliminar. ¡AYÚDANOS A DISMINUIR LA CANTIDAD DE MICROESFERAS QUE LLEGAN AL MAR!